Para el venezolano tradicional, no hay nada mejor que un "guayoyo recién colao". Gran cantidad de aromas, fresco, caliente, y dulcito. Aprendieron a tomarlo desde chiquitos, ese olor tempranito en las mañanas, en la tarde, ese olor que recuerda al hogar.
Pero resulta, que para mi, aficionado al sabor italiano, hijo de italianos, además; el hecho que me pidan prepare un guayoyo es un verdadero insulto. Algo totalmente ANTI-NATURA, una aberración, algo totalmente fuera de lugar. Y Ademas, lo preparan con leche en polvo, y para la licuadora. NOOOOOOO!!!!!!!!
Para mi, el café tiene que ser fuerte, cremoso, intenso, tinto ¿Que es eso de tomar agua con olor a café vale? ¿Pero a quien se le ocurre? No señor, no lo tolero. JAMAS. Además, para los que amamos nuestra maquina de café espresso, sencillamente no hay manera de preparar un GUAYOYO. Contamos los segundos para que el espresso sea perfecto. Ni mas ni menos. Controlamos el tostado para la intensidad de la crema y el sabor. Temperatura del agua, grado de molienda. Tazas calientes. La leche tiene que ser pasteurizada, el vaporizador debe estar limpio y tener una caldera de no menos de 4 litros. PFFFFFFF, ¿Como se te ocurre? guayoyo y café con leche en licuadora... BAH!!!
Pero........
Resulta que con el pasar del tiempo, y con la ayuda de personas especiales en mi vida, aprendes a no ser tan cerrado. A no ser tan italiano podrido, como me dice, aprendí a vestirme un poco mas discreto, sin los colorinches italianos. Esas combinaciones de pantalones a rayas, camisas a cuadros y corbatas de puntitos. Quite la bandera italiana que tenia en el balcón desde el mundial de Alemania 2006, y decidí abrir mis sentidos. Decidí dejarme llevar, y no me arrepiento. Muy por el contrario. Entendí que todas son opciones validas, y hay que probarlas todas, y hay un café para cada momento.
Aprendi, que no hay nada mejor que un guayoyito, cuando estas triste, no hay nada mejor que un guayoyito con lo panas. No hay nada mas sabroso que un guayoyito un domingo en la tarde cuando visitas a ese ser tan especial,y servido en pocillos. Ese guayoyito cuando estas enratonao. Llegando de una rumba.
Un guayoyito sabe a las raíces criollas, a costumbres. y ¿Sabes que? sacado de la licuadora con leche en polvo, queda cremosito...
Desde el colao en media, pasando por las grecas, o la moka, los famosos café de termo en las colas cuando vas a sacarte el pasaporte. Sencillamente, el café, y el guayoyito están en nuestra esencia.
¿Y tu, como lo tomas?
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El aroma del amor bloquea los sentidos y hasta el guayoyo mas aguado sabe a espresso de cafe Arabica.
ResponderEliminar"Italiano Piche", es que cerre los ojos y vi la cara y oi la voz de la persona que dijo esas palabras.
De haber sabido que el con leche en licuadora era parte del menu, lo hubiera puesto en mi matrimonio...
Siempre he pensado que los Guayoyos de maquina son los peores que he tomado, no soy de tomar café pero he saboreado cada uno de los que preparas con tanta emoción para que disfrutemos del café tanto como lo haces tu.
ResponderEliminarAgradezco a esa persona especial que ya no te vistas con colorinches (arrodillada abanicando).
Debo agregar a tu “no hay nada mejor” : que en otros países te pregunten que es un Guayoyito, y decir que en Venezuela se le dice así a nuestro café clarito y aguao´´
Yo sé lo que es un guayoyito con leche en polvo en licuadora y sí queda cremosito... Concuerdo con que el café es lo mejor para compartir con los panas, acompañando las tristezas (sobretodo cuando uno tiene los ojos aguarapaos), para el sueño, para la lluvia y pare usted de contar. Y el café con leche es lo máximo!!!!... Nunca el café sabe igual, todos son diferentes como uno, diferente.
ResponderEliminarMoja casabe en un guayoyito y verás lo que es bueno...
Te felicito Barri!!! Excelente blog que muestra lo bueno y sabroso que es preparar y tomar café... bueno tú que eres el experto.
Este post es increíble, pensé que yo era raro por pensar igual que tu al inicio, ya veo que: o no soy tan raro o somos 2.
ResponderEliminarAunque si me gusta mi colaito de vez en cuando, en especial cuan salgo de mi casa en un viaje en carretera y quiero que ese primer café del día sea laaargo y cargado de cafeína.
El espresso es derroche de sabor y aroma, es el Taj Mahal del mundo del café, es casi querer abusar de los sentidos...
Aunque un guayoyo no tiene precio, mi forma de pedir el café siempre me trae problemas con los que me atienden (marrón claro tibio espumoso), es que en Venezuela es el país donde más variantes del café demandamos, saludos!
ResponderEliminarCómo me identiqué leyéndote, porque en mi casa somos españoles y nunca se hace guayoyitos. Comencé a descubrir las costumbres venezolanas a los 11 años cuando empecé a visitar la casa de mi mejor amiguita del cole, ahí fue que ví por primera "la media" con que se cuela el café en Venezuela, te confieso que escuché por primera vez ese termino el día de ayer por la radio cuando te entrevistaron.
ResponderEliminarEn mi familia tomamos café desde pequeñitos pues tenemos la "mala" costumbre de desayunarnos con café y galletas o magdalenas. Aquí es un horror ver a un niño tomando café.
Ah! y nunca he tomado un guayoyo con leche batido en licuadora, no suena muy bien jajajaja
¿Qué te parece tomar café con hielo? esa costumbre la vi en España en la estación de verano, por mi mente no pasaba el tomarlo frío, aunque nos estemos asando de calor, siempre lo tomamos caliente.
Gracias por mandarme tu blog por Twitter, me gusta tu manera de contar las cosas, la única pega que le haría es la calidad de algunas fotografías que tienes en él, lo siento, siendo fotografa me fijo en esos pequeños detalles.
Te dejo los links de mis Galerías y mi blog por si algún día te apetece visitarme, un saludo!
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